Reducción Mamaria

La reducción de mamas o mamoplastia de reducción es un procedimiento quirúrgico para disminuir el tamaño de las mamas, mediante la extirpación de grasa, tejido mamario y piel. Además puede reducir el tamaño de la areola. Las mujeres con mamas grandes pueden presentar algunos problemas debidos a este exceso de peso, como el dolor de espalda y de cuello, irritaciones de la piel debajo de la mama y problemas respiratorios. La finalidad de la mamoplastia de reducción es proporcionar a la mujer unos pechos más pequeños y con una forma más proporcionada con el resto de su cuerpo.  La reducción de mamas se realiza generalmente para aliviar un problema físico, más que por motivos puramente estéticos. Muchas mujeres que se someten a esta intervención están preocupadas por el excesivo volumen de su pecho que interfiere con muchas actividades y causa molestias físicas. En la mayoría de los casos se espera hasta que el pecho se haya desarrollado completamente, aunque puede realizarse antes si los problemas físicos son muy importantes

La cirugía de reducción mamaria se realiza con anestesia general hospital. Suele ser preciso el ingreso, dándose el alta generalmente al día siguiente.  La cirugía dura entre 2 y 4 horas . Existen diversas técnicas, pero generalmente las incisiones tienen forma de ancla colocándose alrededor de la areola, en una línea vertical hacia abajo desde la areola y en una línea horizontal en el surco que hay debajo de la mama. En algunas ocasiones se puede evitar la< cicatriz submamaria.  A través de estas incisiones se extirpa el exceso de piel, grasa y tejido mamario y se recoloca la areola y el pezón en su nueva posición; en algunos casos se puede asociar liposucción.   Tras la cirugía se colocan unos tubos de drenaje y un vendaje alrededor de las mamas.

Tras la cirugía se podrá hacer vida casi normal a las 24-48 horas. Debe limitar las actividades físicas fuertes durante unas semanas, y podrá reincorporarse al trabajo en 2-3 semanas El vendaje o los apósitos serán retirados en unos días, siendo sustituidos por un sujetador especial, que deberá llevar durante un período de tiempo. Es normal tener una sensación de ardor en los pezones durante las dos primeras semanas y puede ser normal tener una disminución de sensación en los pezones, aunque esta situación es generalmente temporal. Los problemas de cicatrización son más frecuentes en fumadores. Tras una reducción puede verse afectada la capacidad de dar de mamar.